PORFIRIAS
- Sebas Morales
- 21 may 2023
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 26 may 2023
Letra:
Escribo sin cesar.
Escribo sin pesar.
Escribo sin pensar.
Escribo sin rezar.
Escribo sin estar.
Escribo sin rogar.
Escribo sin parar.
Escribo sin dudar.
Escribo sin sudar.
Escribo sin radar.
Escribo sin hablar.
Escribo sin callar.
Escribo sin narrar.
Escribo sin ganar.
Escribo sin fallar.
Escribo sin amar.
Escribo sin odiar.
Escribo sin sumar.
Escribo sin restar.
Escribo sin matar.
¡PORFIRIAS!
Me dirías que medirías mi valía,
pero más te valdría que no me subestimes mi valía.
Soy de esta vida agria que mata con tanto dulce,
que no me seduce el dulce de esta vida agridulce.
Que seduce como pútrida guayaba rancia,
que no me pagaría la rabia de esta negra rabia.
Cuánto sacaría las caries de escoria en las orgias
que follan las novias de fobias en mis torturas sombrías.
Las historias son memorias impropias de copias
y embolias que tuercen victorias sin glorias sordas.
En la cornea de esta mente latente en el lente
presente en mi mente existente de recuerdos dementes.
Mi semblante oculto detrás del tapete,
esconde la sombra invisible cada vez divergente,
se escucha la voz inaudible con tez emergente,
que expresa el mensaje prohibido de pelaje diferente.
¡PORFIRIAS!
¡PERFIDIAS!
!PORQUERÍAS!
¡VENDIMIAS DE ENVIDIAS!
Verdades y detalles que me hacen que me desmaye,
un desmadre en parte de mis sórdidos ruidos mentales.
En mensajes que se parten en cristales cerebrales,
con puñales infernales de pensamientos letales.
Cantares y maldades en mis huecas soledades
son derrames fantasmales en mis tuertas tempestades.
Que remare en mis mares mientras este ego hablare
junto a mis refranes que me aúllan como fieles canes,
invaden sin piedades a este Sebastián Morales,
sin modales de Versalles ni saludos coloquiales.
Los infames no me dejaré llevar por sus andares,
en los viajes, y los pésames de claroscuros valles;
sin las llaves, sin las calles, sin las claves, sin las naves
sin salida, sin huida, sin escape; nada, ¿Vale?
Remaré y andaré mientras sientas mis vocales
bucales, volcanes, corales de mi pecho de rosales.
De rodales, de portales, de rodajes, de millares
de peajes temporales que a cada sueño vale.
Vale chaval , miembro de mi camada,
la calmada tensión rebela negativo en cámara;
camaradas, no sé acuesten con la fama,
que afana y ufana y lástima, escatima,
con aquellos picoteos de parvadas,
depravadas, desalmadas y no bien intencionadas.
Son granadas salvajadas, sobrevaloradas;
es la pena que apena y clava a la brava, mi pana
… mi camarada.
Cada herida sana con sales, y sales de Salem;
aunque hablaren, criticaren, comentaren y juzgaren;
y brote enfermedades, falsedades, soledades;
da igual lo que pensaren o lo que disparen.
En el certamen dejad que la verdad sin más estalle,
y como la sangre bendita por el suelo se derrame;
y que se desengañen, confesasen, encontrasen;
y que se torturasen, desbaraten, saboteasen.
Con la ley de gravedad, hasta las mentiras se caen;
con la relatividad, las verdades se contraen;
con la ley de la entropía, la vida solo es un viaje;
y con la de la simetría, lo bello es inexplicable.
A los oprimidos .. dejar que se declaren;
los artistas con sus obras … dejar que expresaren;
los caídos y perdidos … dejar que se levanten;
y a los visionarios esperanzas anunciaren.
A los pobladores, alegrías lloviznaras;
a los soñadores que su vocación brotase;
a los temerarios que a lo incierto se lanzaren;
y a todo ser humano que su alma apreciare.
Solo te rimo cómodo,
me acomodo a hechos,
a como de lugar,
deshechos como flores de helechos,
cultivo en mi juglar.
Al jugar con la poesía,
y sus letras preferidas
y sus curvas literarias,
y sus estrofas prohibidas
Coro a coro, con el corazón,
canto al unísono.
Corro y corro, desde el altavoz
hacia el audífono.
Solo todos mis monólogos,
son silencios rotos.
Solo las palabras y mi voz
traspasan los poros.
Escupo al micrófono,
mientras filosofo el foco
y lo desenfoco,
pienso perezoso,
escribo bien ocioso,
bien deseoso,
bien jocoso,
bien juicioso,
bien ansioso,
de que el verso quede
ya bastante hermoso.
¡PORFIRIAS!
Mentirías que meterías la pata,
que merecías ser mesías,
y fue otra fe de erratas.
Otra sed de ratas,
otra tienta a gatas,
que perderías y pedirías
otra suerte ingrata.
Perdido en el tono bro.
Lo enciendo bien cabrón
como carbón, con el fuego
del corazón de este cimarrón
con sinrazón, mentalidad
de Salomón, no fanfarrón
con galardón, trabajador
con vocación, soy un varón,
un campeón, sin complejo de faraón.
Mi propio loco entrenador,
esta es mi propia maratón,
yo ya salí del cascaron,
bien cascado por la experiencia
que me dio licencia,
ciencia cierta que acierta ideas inciertas.
Me desanimo a esta vida que sabe a desabrigo,
sin abrigos de la frialdad de estar solo sin amigos.
Por eso, en las letras me ilusiono de un camino,
y me importa un comino lo que dirán resentidos.
Hibrido en el estilo, no me quedo pálido
en el peligro, si peligro lanzo
letras que disparo con perdigón,
si perfilo a los pérfidos, intrépidos
y perdidos sin remedio en mi tono bro.
Lo enciendo bien cabrón con ignición,
como el grito tribal de un vikingo anglosajón,
como el grito de guerra de soldado en batallón,
más crudo y salvaje que un tosco "Homo Cromagnón".
No creo en magia negra,
ni en magia blanca;
solo creo en la magia
de mi sonrisa franca-mente
de repente esta mente está demente,
tanta mente, saca frases
que prometen a otras mentes;
vehementes y creyentes,
conscientes y que sienten,
que eleven su inconsciente,
con aura inteligible,
con alma inteligente,
con bocas diferentes,
a éxodos divergentes,
que son indescriptibles.
Como Prometeo, expulso fuego contra filisteos,
que bloqueo con su música que me suena a peo;
es que estos filisteos, creen que me bloqueo y soy Odiseo
que da muchas vueltas hasta el trofeo.
Si bien de la vida soy reo,
rodeo los problemas soñando
las posibilidades de Morfeo.
Con musica yo me rodeo,
y cada canto es un rodeo.
Donde creo en lo que canto,
y canto en lo que creo;
en la vida agridulce, en lo lindo y lo feo;
lo sublime, lo temible, lo increíble, yo lo leo;
y voy a la conquista de mis propios Pirineos;
a pesar del limbo, exploro mi mar egeo;
siendo más sabio en el camino como Galileo.
Si sigo no paro, si paro despues no sigo,
consigo reparo, si reparo con hilos vocales,
con hilos reparo, hablando conmigo el señor sonido,
en huecos mentales … prohibidos y escondidos.
Saco colmillos con filo a los supuestos pilos,
con mi lengua corro a leguas treguas como el rio Nilo,
hasta que me desmayo y engendro todo lo que escribo.
Porque escribiendo me siento un rey persa como Ciro.
aunque la música es la maestra y yo solo su pupilo.
Ella es tan sabia como la matriarca de una tribu-to
con mi boca de tinta tiñendo en el papiro.
Porque escribiendo comparto la savia contigo,
porque el pupilo con más pupila se vuelve pilo,
porque el pupilo con savia labia, pule su estilo,
porque el pupilo con sabia fragancia, muestra el brillo.
¡PORFIRIAS!
¡DESIDIAS!
¡BRUJERÍAS!
¡PERVERSIÓN DE VALQUIRIAS!
Hedor de ignominias,
tenor de distopias,
terror de inmundicias,
error de herejías.
¡PORFIRIAS!
Ofrendas exiguas,
traición de ideologías,
ron de demagogias.
Red de sicopatías,
sombras de antipatías,
humo de soberbias,
caos de entelequias.
Comentarios